« Pour le dialogue dans la politique contre le terrorisme »

Elecciones Europeas

El candidato de CiU apuesta por el diálogo para acabar

con ETA

IU propone que la Constitución europea prohíba las

guerras preventivas

EL PAÍS / CARLOS E. CUÉ - Barcelona / Madrid

EL PAÍS | España - 02-06-2004

Ignasi Guardans, cabeza de cartel de Galeusca, formuló ayer en

voz alta una opinión generalizada pero expresada hasta ahora

entre bambalinas en su partido, Convergència i Unió. Guardans,

al igual que el PNV, defendió la necesidad de hablar con ETA o

con su entorno para lograr el cese del terrorismo etarra. El

cabeza de lista de Izquierda Unida, Willy Meyer, pidió en un

mitin en Fuenlabrada que la Constitución europea prohiba las

"guerras preventivas".

En declaraciones al programa Hoy por Hoy de la cadena SER,

Ignasi Guardans afirmó: "Sí, yo creo que en este momento se

habla con el enemigo. No se habla con los amigos cuando tiene

que buscarse la paz, sino con los enemigos".

Guardans rompió una lanza a favor del PNV y aseguró que nadie

mejor que esta formación política para "saber en qué

condiciones y de qué manera se puede hacer. Si se busca la paz

hay que poder hablar. No sé si directamente con ETA, con

quienes tienen las manos manchadas de sangre, pero con gente

que puede hacer llegar mensajes a ETA es posible". El líder de

Convergència, Artur Mas, se negó ayer a pronunciarse sobre

este tema. "No es un asunto para hablar en campaña electoral y

menos aquí en el Parlament", señaló.

Respecto al plan Ibarretxe y la posición que adoptará CiU en

el Parlamento Europeo, Guardans manifestó: "Habrá que ver en

qué acaba esta propuesta y lo decidirá soberanamente el pueblo

vasco a través de sus representantes políticos. Lo que allí

salga, para mí va a ir a misa. Que decidan los vascos lo que

quieran hacer con su futuro y eso es lo que apoyaré en

Europa".

El candidato de Galeusca se comprometió a "forzar" una

política europea contra las deslocalizaciones industriales y

reclamó al Gobierno central que "aclare" su política sobre

horarios comerciales y la apertura en festivos.

Por su parte, Izquierda Unida propuso ayer que la futura

Constitución europea recoja una prohibición expresa a toda

"guerra preventiva", como la que ha desarrollado EE UU en

Irak. El cabeza de lista de IU, Willy Meyer, incluso fue más

allá y pidió que ese texto rechace la utilización del

territorio de la Unión como bases militares de terceros

países, lo que impediría la utilización de las bases de la

OTAN, una vieja reclamación de IU.

Según Meyer, "estas bases han sido estratégicas en conflictos

como el iraquí, ya que permiten a países como Estados Unidos

intervenir en cualquier punto del mundo con mucha rapidez,

como lo demuestran los primeros bombardeos a Bagdad con

aviones que partieron de las bases en España". El candidato

aseguró además que "la UE no puede decir que defiende la paz

si es el trampolín para este tipo de acciones", y recomendó en

cambio que esas bases se utilicen como "lanzaderas de ayuda

humanitaria bajo mandato expreso de la ONU". Se refirió en

concreto a las bases de Rota y Morón, utilizadas en la guerra

de Irak y en la guerra del Golfo.

El mitin de Izquierda Unida en un hotel de Fuenlabrada, al que

acudieron unas 200 personas, se produjo casi a la misma hora

en la que los cabezas de lista del PSOE y del PP, José Borrell

y Jaime Mayor Oreja, debatían en Tele 5. Izquierda Unida,

enfadada con un cara a cara que califica de "poco democrático"

porque excluye a los partidos más pequeños, colocó en una

silla junto al atril de oradores dos sillas con dos fotos: una

de Mayor y otra de Borrell. Y tanto Meyer como Gaspar

Llamazares, el coordinador general de IU, hicieron un

simulacro de debate, dirigiéndose a los dos principales

protagonistas de las elecciones.

A Mayor le dedicó Llamazares una de sus habituales pullas:

dijo que "seguramente también llegará tarde al Parlamento

Europeo, que está mucho más lejos que el vasco", en referencia

al retraso del ex ministro del Interior que hizo perder una

votación clave al PP vasco. Llamazares trató de convencer a

una parte de sus potenciales electores, que el 14 de marzo

apoyaron al PSOE, con el argumento de que IU "siempre llega

primero a todas las movilizaciones, mientras el PSOE llega al

final, presionado por Izquierda Unida".